El artículo de hoy realmente se aleja un poco de la ciudad de Cáceres, pero me atraía tanto el lugar que he querido mostrároslo. En la confluencia de los ríos Almonte y Tozo, en el término municipal de Trujillo se encuentra la finca "Azuquén de la Villeta", en la que se encuentran los restos de los que voy a hablaros hoy. Permitidme, en esta ocasión, que no de detalles demasiado claros de la manera de llegar, ya que lo hice atravesando fincas privadas, con el permiso de los dueños, pero con la promesa de no desvelar el camino utilizado. Después de una buena caminata, atravesar preciosas dehesas en primavera, bajar desfiladeros, atravesar ríos y subir más desfiladeros, nos topamos con una zona amurallada de casi 2 Km de perímetro delimitando un área de unas 12 hectáreas (mediciones aproximadas realizadas sobre mapa) situada en el espigón que forman la unión de estos dos ríos. La historia de este lugar sorprende tanto como su buen estado de conservación y su total olvido
Un recorrido por la Ciudad de Cáceres y sus alrededores, mirando los detalles que nos rodean y que pasan desapercibidos. Algunos de estos lugares serán conocidos por todos, otros sólo por algunos pocos, pero en definitiva, la idea es mostrar la riqueza monumental, cultural y natural de la ciudad y sus alrededores.