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Mostrando las entradas etiquetadas como Lápidas

¿Y TÚ DE QUIÉN ERES? UNA LÁPIDA ROMANA EN UN LAVADERO DE LANAS

Hace unos días estuve en un pueblo cercano, del que ya os hablaré, y que hasta ahora no había visitado nunca. En una de sus plazas, frente a un precioso palacio semiabandonado, me llamó inmediatamente la atención lo que parecía una estela romana. En cuanto llegué a casa entré en Hispania Epigráfica para localizarla, y no la encontré. El azar hizo que en esa búsqueda me topara con la descripción de una lápida sepulcral en el lavadero de lanas de San Miguel, en Arroyo de la Luz, junto a la Estación Arroyo-Malpartida, y que ya os enseñé hace tiempo. En la descripción señalaba que la piedra estaba en LA ZONA de la fachada. En cuanto tuve algo de tiempo me subí a la bici y me fui a buscarla. Por cosas de la emoción y de no apuntar la literalidad de la cita, me puse a buscar EN la fachada… y claro, no aparecía. Ésta se encuentra lucida prácticamente en toda su superficie, así es que pensé que estaría oculta porque, además, en la web no aparece ninguna imagen de ella. Empezaba a

LA PIEDRA QUE NOS MANTUVO ENGAÑADOS

No hace mucho os mostraba AL DETALLE la cacereña Ermita del Amparo y os contaba que es de los lugares sobre los que más mentiras e inexactitudes se han escrito a lo largo de los años, y que aún hoy plagan las webs y blogs que hablan de ella. Una de esas mentiras hace referencia a su origen. Esta ermita se sitúa en lo que se conocía como el camino del Calvario, porque era allí donde acababa el sendero original que posteriormente se prolongó hasta la Montaña. Como es de suponer, todo su recorrido estaba flanqueado por las cruces del Vía Crucis, que era masivamente frecuentado en los trece días en los que Nuestra Señora de la Soledad pasaba al año en dicha ermita del Calvario. Una de aquellas cruces se situaba donde hoy está el Amparo y fue mandada construir por Francisco Jiménez y su mujer Juana Pérez en el año 1619. Esto lo sabemos porque lo dejaren escrito en la base de la cruz que posteriormente fue utilizada en la construcción (o una de las reconstrucciones) de la actual ermita.

HORNACINAS SIN ARCO I. UN NAZARENO Y LA PUERTA DE MÉRIDA

Continúo con el doble monográfico de “Arcos con hornacina” y “Hornacinas sin arco” asomándonos entre la plaza de Santa Clara y la Calle Puerta de Mérida, que recibe ese nombre en recuerdo a una antigua entrada a la ciudad que fue demolida en el siglo XVIII. Era una de las 4 entradas al recinto amurallado original, la más meridional y de ella no queda ningún vestigio arqueológico, aunque existen documentos que hablan de su construcción a base de cantería granítica, y que poseía una pequeña torre anexa. Además, se encontraba flanqueada por otras dos torres albarranas, una llamada Torre de Mérida, de la que no hay prácticamente ninguna información, y otra denominada Torre de Mari Lucas, demolida junto a la puerta, y que en parte de la bibliografía se la conoce como Torre del Potro de Santa Clara. Los investigadores coinciden en que esta entrada debió de ser muy similar al Arco del Cristo. A mediados del siglo XVIII el aumento demográfico y algunas decisiones políticas, llevan a a

UNA LÁPIDA EN EL ARCO DE LA ESTRELLA AL REVÉS

Hace ya unos meses os conté la controvertida historia de la construcción del Arco de la Estrella en el artículo titulado " LA VIRGEN QUE ACABÓ EN UN CEMENTERIO ". Hoy os quería mostrar un pequeño DETALLE del arco. Tras la imagen de la Virgen que finalmente se colocó en el pequeño tabernáculo que lo corona, realizada en arenisca de Villamayor, se situó una lápida en la que se detallaba quién había financiado la obra (Bernardino de Carvajal), su constructor (Manuel de Larra y Churriguera) y ese tipo de cosas que uno quiere que queden para el futuro. En una reforma posterior, de la que desconozco la fecha de realización, algún operario, o dios sabe quién, se equivocó a la hora de colocar esta lápida, por eso ahora, si nos fijamos con detenimiento, la letras se ven del revés, y entre eso, su colocación y su mal estado, entender lo que quiere decir se hace complicado.  Hoy quería mostraros este pequeño detalle del que muchos no se habrán percatado, aunque este

RESTOS ROMANOS EN UN CHALÉ DE LA MONTAÑA

Hace ya meses os mostré un ara romana situada en la fachada de una casa de campo, en las inmediaciones de la ciudad. Por ser discreto no especifiqué su ubicación exacta, pero revisando unos libros que tenía por casa, y a recomendación de mi amigo Samuel del fantástico blog Extremadura: caminos de cultura , descubrí que existía un interesante estudio sobre ella y que se detallaba el lugar exacto donde actualmente se ubica. Por ello he decidido ampliar los datos que os di en aquel momento. Se trata de un ara de granito gris de grano medio en muy buen estado de conservación. Tiene unas medidas de 73 x 26 x 13 cm, aunque su verdadera profundidad es muy complicado saberla porque se encuentra empotrada en la fachada de un chalé de la Montaña. Está coronada por dos molduras lisas transversales de 26 cm de largo y 7 cm de alto, separadas por un plano hundido de 25 cm y 6 cm de alto. Sobre la moldura dos PULVINI en forma semicilíndrica que alcanzan los 6 cm de alto y separadas por un e
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