Este verano, paseando por las calles de mi pueblo de adopción: Aldea del Cano, reparé en una casa que estaba en obras en la Calle Real. Habían picado la fachada y habían liberado la cantería de la puerta de un lucido de esos que se pusieron de moda hace unas décadas, y que tanto daño estético siguen haciendo en los pueblos. Gracias a la luz incidente del fin de la tarde, reparé en que al lado izquierdo del dintel de la puerta había algo grabado: era una cruz tumularia. Las cruces tumulares o tumularias (cruces sobre pie triangular), denominadas así en virtud de la semejanza de la silueta del pie con los túmulos funerarios que se grababan en determinados lugares, como los exteriores de las iglesias, como señal de la muerte de los caballeros batidos en duelo y por tanto excomulgados, según los cánones dictados en el Concilio de Trento181. Claro está que estas cruces, de las que se han dado a conocer un buen número de ellas en fecha reciente en la ciudad de Toledo, se encue
Un recorrido por la Ciudad de Cáceres y sus alrededores, mirando los detalles que nos rodean y que pasan desapercibidos. Algunos de estos lugares serán conocidos por todos, otros sólo por algunos pocos, pero en definitiva, la idea es mostrar la riqueza monumental, cultural y natural de la ciudad y sus alrededores.