Ir al contenido principal

CONVENTO DE SAN ANTONIO DE PADUA EN GARROVILLAS I

Aunque algo alejado de la ciudad de Cáceres, el convento de San Antonio de Garrovillas es lo suficientemente espectacular como para que haga esta pequeña excepción y os lo muestre. En este artículo me centraré en la fundación del convento y en su iglesia. Su estado de abandono es consecuencia no sólo de la famosa desamortización de 1843, sino de la desidia y el mal trato de los responsables privados y públicos desde aquel día hasta hoy mismo.



















La Bula fundacional es otorgada el 16 de marzo de 1476 por el Papa Alejandro VI , a instancias de los Condes de Alba de Aliste; Enrique Enríquez y Mª Teresa de Guzmán (1405 – 1488), en ella se dota: “Monasterio con Iglesia, claustro, casa, cementerio y oficinas, bajo la advocación de San Francisco”. Su fundación responde a la promesa hecha por Doña María de Guzmán el Bueno y Figueroa, hija del Conde de Niebla, puesto que su marido Don Enrique Enríquez, primer Conde de Alba de Aliste, estaba cautivo en Toro por el rey portugués Alfonso V el Africano, la devota esposa prometió que si su marido salía con vida del cautiverio portugués, fundaría un Convento en Garrovillas, y cumplió su promesa.














La primitiva edificación gótica fue profundamente transformada, ampliada y adecuada a los gustos propios del renacimiento durante la segunda mitad del siglo XVI. En las obras intervino Pedro de Ibarra, uno de los principales arquitectos de su tiempo. De este periodo son buena parte de la iglesia, con sus espectaculares bóvedas de crucería, y el magnífico claustro, en el que estuvieron enclavadas las capillas del Cristo de las Injurias y de la Vera Cruz.








Entre 1656 y 1661 tiene lugar una nueva y amplia reforma con dineros que obtiene Luis Enríquez de Guzmán (IX conde de Alba de Liste) en Nueva España y Perú, donde fue Virrey. El templo se orna con suntuosos retablos y pinturas y allí se entierran el conde y su esposa. Sus tumbas se ornan con esculturas de mármol de ambos en actitud orante, esculturas cuya localización actual se desconoce.


En 1668, los habitantes del pueblo sufragan la edificación de la sacristía, cerrándose el ciclo de la principales obras en el conjunto. En ella encontramos los mejores restos de pinturas observándose un doble lucido que la ruina ha dejado al descubierto.


















La famosa y desgraciada Desamortización provocó la exclaustración de los frailes y su posterior destrucción. La huerta fue dividida en cinco lotes para ser subastada, la iglesia y las restantes dependencias fueron vendidas. Desde entonces sus muros han servido para albergar como fábrica de tejidos, herrería, esquiladero de ovejas y establo.

FUENTES BIBLIOGRÁFICAS:
El convento de San Antonio de Padua de Garrovillas. José María Velaz Pascual.
http://alkonetara.org/files/convento_de_san_antonio.pdfhttp://blogs.hoy.es/paraisos-olvidados/2013/02/07/el-convento-de-san-antonio-de-padua-170-anos-en-el-olvido/

Comentarios

  1. Qué sitio tan impresionante y qué pena verlo en ese estado con todas las pintadas de unos descerebrados que se creerán Miguel Ángel!

    Como sugerencia, estaría genial que pudieses incluir la localización en Google Maps de los sitios que describes. A mi particularmente me resulta mucho más útil que descripciones sobre cómo llegar.

    Saludos!

    José Luis

    ResponderEliminar
  2. Hola Jose Luis¡¡¡¡ Gracias por comentar¡¡¡ El sitio es espectacular, pero es una pena el estado en el que se encuentra. En cuanto a lo de la localización en el Google Maps es algo que me estoy planteando hace tiempo, pero tengo dudas, porque para mi a veces lo más divertido es buscar los restos y no sólo encontrarlos, y dando tantas facilidades el investigar, probar, buscar caminos se perdería. De todas formas me lo sigo pensando ¡¡¡¡ Gracias y un abrazo¡¡¡¡

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...

Entradas populares de este blog

EL CALLEJÓN DE LOS HUESOS

Cuando uno viaja se encuentra lugares y rincones misteriosos, con leyendas truculentas, fantasmas del pasado, apariciones nocturnas o viejos cementerios que desatan historias muy atractivas para el turismo. Pues aquí en nuestro Cáceres, aunque casi nadie lo conoce, tenemos un callejón cuyos muros están plagados de huesos posiblemente humanos y que pasan inadvertidos a los visitantes. Es cierto que existen por el mundo capillas construidas con huesos, como ocurre con la " Capela dos Ossos " de Évora, no muy lejos de aquí. Hay otras en Austria, en Italia, la República Checa, o en el mismo Cáceres, donde hay una sacristía cuyo suelo está formado por huesos de cordero que ya os enseñaré otro día. Pero en este caso no hablamos de una construcción con huesos, sino que entre los materiales usados para la construcción de un muro aparecen numerosos fragmentos de huesos.  Desde la cuesta de la Compañía, que une la plaza de San Jorge con la de San Mateo, parte un pequeño calle

UN AMULETO ISLÁMICO POR LAS CALLES DE CÁCERES: LA MANO DE FÁTIMA

A todos nos es familiar la imagen de un llamador con forma de mano en casas más o menos antiguas, e incluso en las modernas, pero quizá no seamos consciente del origen y evolución de este símbolo y todo el significado que encierra. Hoy os quiero enseñar, Al Detalle, este curioso elemento que salpica toda nuestra ciudad y que encierra un gran significado profundo y simbólico. Esas aldabas con forma de mano son una evolución de otro símbolo que aún pervive, y que por estas cosas de la globalización, es cada vez más común: La Mano de Fátima. Este icono es la representación de una mano abierta con los dedos juntos y colocada de forma plana. Y aunque a nosotros nos llega como herencia islámica, la imagen y simbolismo de la mano puede encontrarse en el propio origen de la humanidad, no olvidemos las pinturas de manos con dedos “amputados” que en nuestra cueva de Maltravieso representan las pinturas rupestres más antiguas del mundo con una edad de, al menos, 66700 años. Pero también

LA CASA DE CAMPO, Y VIDA, DEL CAMARERO MÁS FAMOSO DE CÁCERES.

Hoy os quiero mostrar, Al Detalle, una de esas construcciones de actual uso agropecuario, pero que encierra entre sus agrietados muros la historia de un pasado floreciente, casi olvidado, y episodios destacados de la historia de nuestra ciudad, que se sepultan entre rebaños, uralita y abandono. Si atendemos al Registro Catastral, nos marchamos a la finca Torre Camarero, polígono 18, parcela 3, del término municipal de Cáceres. También se la conoce como "casa a la torre" o simplemente como la casa del camarero. ¿Pero quién era este camarero? Cuando visitamos la casa, con actual uso agropecuario como decía, y si los perros permiten que nos acerquemos un poco a la fachada, lo que más llama la atención es un precioso escudo enmarcado de alfiz con las armas de la familia de los Golfines, lo que nos da la primera pista de la identidad de ese famoso camarero. No obstante, el reto no es demasiado complicado a poco que se conozca ligeramente la historia de la ciudad de Cáceres. Nos