Dibujo: Pedro Camello
En estos días estamos celebrando al Patrón de Cáceres, San
Jorge, con la quema del dragón, la leyenda de la Mora de Mansaborá, el
desfile…pero olvidamos en ocasiones que lo que estamos celebrando en realidad
es la “reconquista” de Cáceres.
Este proceso fue, como solía ser la política y los
conflictos bélicos de la época, algo verdaderamente complejo y lento. Yo hoy os
quiero hacer un resumen esquemático de lo que aconteció desde que los
Almorávides llegaron a nuestras tierras tras ganar en la Batalla de Sagrajas,
hasta que el 23 de abril de 1229 Cáceres es tomada definitivamente por las
tropas de Alfonso IX de León.
Primero quería aclarar que lo haré de manera muy, muy
esquemática sin ahondar en los personajes ni demasiado en los contextos históricos
por dos razones: la primera es que la complejidad de este proceso se escapa a
mis conocimientos, y, por otro lado, porque la pretensión de esta entrada y
este blog, es divulgar un conocimiento sencillo, aunque riguroso y claro, de
los acontecimientos ocurridos en nuestra ciudad, sin querer ejercer de lo que
no somos. Así es que manos a la obra… comencemos por el principio.
Primero tendremos que entender la caída de la NORBA
CAESARINA y saber qué se encontraron los “musulmanes” al llegar a nuestra
ciudad.
En el 411 llega a nuestro Cáceres la invasión bárbara de
manos de los Alanos, aunque éstos duran poco porque son expulsados en el 418
por los visigodos. Tras la expulsión de los Suevos por Leovigildo se desata una
guerra civil entre éste que defendía el Arrianismo y su hijo Hermenegildo que
defendía el catolicismo que acaba arrasando lo que quedaba de la Norba. Cáceres
cae en el abandono y permanece así según algunos autores (otros creen que no
existió tal abandono) durante la dominación visigoda y los primeros años de las
invasiones islámicas.
LOS ALMORÁVIDES (1088-1174)
Los Almorávides eran grupos de monjes-soldado nómadas que
provenían del Sáhara, y que durante los siglos XI y XII logran conquistar Mauritania,
Argelia, Marruecos y la mitad sur de la Península Ibérica. Mientras en el
norte, los reyes intentaban frenar esta entrada. Alfonso VI de Castilla es
capaz de tomar Coria en 1077 y desde ahí emprende la batalla ganando terreno
poco a poco en su camino al sur hasta que se produce la Batalla de Sagrajas en
1088 a unos 17 Km de Badajoz, en la que los Almorávides vencen y el rey,
literalmente, tiene que salir por patas. Es entonces cuando este pueblo va
ascendiendo y toma la ciudad de Cáceres para instalarse en ese 1088. Así YUSUF-BEN-TASHUFIN se convierte en el
primer caudillo almorávide de Cáceres y empieza a levantar lo que quedaba de la
Norba. Nuestra ciudad se convierte en un lugar estratégico importante para el
mantenimiento del control de la zona.
Poco a poco el poder Almorávide se va debilitando y Cáceres
es tomada por Alfonso VII en 1141 y vuelve a ser perdida en 1144 a manos de ABD
Al MUNIN.
Las luchas internas entre distintos grupos musulmanes llevan al debilitamiento de los Almorávides frente a los Almohades que les vencen en 1147, aunque este cambio llegará algo más tarde a Cáceres como ahora veremos. En estos años hasta que los Almohades se instalan definitivamente la ciudad pasamos por varias etapas muy curiosas, incluso llegando a depender de la corona portuguesa cuando Geraldo Sempavor toma nuestra tierra en 1165. Este señor era un mercenario o bandolero que con un ejército de 500 hombres asaltaba pueblos, caminos y ciudades y se los vendía al mejor postor, a veces al reino de León, otras veces al de Castilla y sobre todo a la Corona de Portugal. Así pasamos a depender de ella desde 1165 a 1169 cuando Cáceres es nuevamente conquistada por Fernando II para el reino leonés.
El monarca designa al cuidado de la ciudad a una serie de Caballeros
que forman una orden religiosa-militar que se conocería como los FRATRES DE
CÁCERES o por los CABALLEROS DE LA ESPADA. Fernando II entrega el control a
esta orden el 1 de agosto de 1170, siendo el primer Gran Maestre Pedro Fernández.
Toman como “sede” la iglesia de Santiago y entre otras cosas mandan construir
una torre cilíndrica en las traseras de lo que hoy es Santa María, la Torre
Redonda del Palacio de Carvajal, o al menos, eso dice la tradición.
Dibujo: Pedro Camello
Pero como decíamos, los Almohades que habían vencido a los
almorávides, eran muy fuertes y van expandiendo su poder llegando aquí en 1173
cuando se produce la gran batalla en la que unos 40 Fratres resisten en la
torre redonda según algunos autores, porque no está documentado, la encarnizada batalla comandada por ABU YA´CUB YUSUF, que
finalmente los ejecuta y toma definitivamente Cáceres.
Durante mucho tiempo se ha dicho que la torre en la que
estos caballeros se encerraron y murieron fue la Torre de Bujaco, cuyo nombre
provendría de la derivación de ABU YA´CUB. Esto carece de sentido por dos
razones: la Torre de Bujaco por aquella época no existía aún y porque no sería
lógico nombrar una torre con el nombre de alguien que ejecutó a 40 caballeros
cristianos y arrebató la ciudad a la cristiandad.
LOS ALMOHADES Y HUDÍES (1173(4)-1229)
Los almohades tienen un origen bereber marroquí, surgiendo
como reacción a la apertura religiosa que se estaba produciendo en los
almorávides. En Cáceres son los que rehacen la muralla tal y como la conocemos
actualmente en algunos puntos, convirtiendo la ciudad en una fortaleza
inexpugnable. Y con ese nombre, el de fortaleza o castillo la denominan,
dándole el nombre de HIZN QAZRIS de donde deriva el nombre de Cáceres. Dividen
la ciudad en:
- ALBACAR: situado en la zona sur y servía para el descanso de soldados, recepción de ganado o caballerías…
- ALCAZABA: en la zona de San Mateo y el Palacio de las Veletas, donde construyen nuestro magnífico Aljibe.
- MADINA: estaría por donde ahora está Santa María y estaría destinada al pueblo en general.
De esta manera nuestra ciudad se convierte en un lugar de
gran importancia estratégica con unas murallas que la hacen un bastión difícil
de conquistar. Esto y su fortaleza y victorias, hace que los almohades permitan
un periodo más o menos largo de estabilidad en nuestras tierras. Aunque fuera
un periodo relativamente extenso, eso no quiere decir que fuera tranquilo,
porque las tropas de Fernando II son capaces de replegarse para no perder
Ciudad Rodrigo y así se establece la frontera bélica, más o menos, en lo que
ahora es el límite entre Cáceres y Salamanca. Fernando II sigue intentando la
expansión al sur y mantienen asediada la fortaleza cacereña durante 5 meses en
1184 aunque no consigue la ansiada conquista y tiene que retirarse. Fernando II
muere y le sucede su hijo Alfonso IX con bastantes problemas para hacerse con
el reino, a decir verdad, aunque comienza pronto una oleada de ataques por la
frontera sur.
En 1212 se produce la famosa batalla de Las Navas de Tolosa
en la que comienza la caída de los almohades. Incluso el papa Honorio III envía
apoyo al rey leonés para luchar contra los “infieles” y pone a su disposición
un ejército cruzado procedente de Gascuña, en el que estaba el famoso SAVARIC
DE MAULEON, un rico noble profesional de la milicia que pasó su vida de guerra
en guerra y que luchó al lado, entre otros, de Ricardo Corazón de León o Juan
Sin Tierra. Todos ellos sitiaron Cáceres en 1218 aunque sin el resultado
deseado, al igual que tras el sitio de 1222. Cuando sí se consigue la
reconquista, aunque efímera, es en 1225, ya que las tropas cristianas sufren
tantas bajas que, al llegar los refuerzos almohades provenientes de Mérida, la
pequeña conquista se queda en una anécdota y no se puede consolidad la
victoria.
Pero como habíamos dicho, el poder de los almohades va
decayendo agravado por las luchas internas con otros grupos musulmanes. Un
grupo de Hudíes procedente del reino de Zaragoza y la zona de Murcia, comandado
por Muhammad inb Hud al Matawakkii ala Allah toma el poder de Cáceres en 1228, pero su fuerza no era la que se
había tenido anteriormente y para Alfonso IX se abre la posibilidad de
reconquistar definitivamente la ciudad como ocurre el 23 de abril de 1229, hace
ahora 790 años, pasando a formar parte del reino de León y fuimos
“reconquistados” definitivamente para la cristiandad. A partir de tomar nuestro
Cáceres se continúa el avance al sur con conquistas casi inmediatas tan
importantes como las de Mérida o Badajoz.
Lo que ocurrió a partir de ahí lo contaré otro día, Al
Detalle.
BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA
Historia de Cáceres. Miguel Martín Jiménez de Muñana
Cáceres, Resumen de la Historia Local. Antonio Rubio Rojas.
"Cruzados en la Reconquista", de Francisco García-Fitz
Debo agradecer también la colaboración de mi amigo Pedro Camello que me ha ayudado a elaborar este post y me ha cedido los dibujos usados para ilustrarlo.
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