Ir al contenido principal

LA CASA DE MARTINA GÓMEZ, AL DETALLE.

Hoy vamos a visitar, Al Detalle, una de esas casas de campo con las que nos topamos recorriendo y explorando los caminos y que guardan mucha historia entre sus maltrechos muros.


Por el camino público que va de Arroyo de la Luz a Aldea del Cano, recién cruzado el río Salor dirección sur, y tras subir un pequeño repecho, nos topamos con una casa que aún se sigue usando como explotación ganadera y en la que algún perro te invita a no acercarte demasiado, aunque sin llegar a entrar, pude hacer algunas fotos gracias al zoom en la conocida como La Casa de Martina Gómez.
 
Lo primero que se nos viene a la cabeza es preguntarnos por la tal Martina Gómez. Lo sorprendente es que después de tantos siglos, la casa conserve su nombre, porque doña Martina Gómez Espadero, vivió a caballo entre finales del siglo XIV y principios del siglo XV y por extraño que parezca, sigue dándole nombre a la propiedad.



Si miramos la fachada, aunque sea de lejos, destaca un precioso escudo tallado en granito de los Golfines. ¿Cuándo llega la casa a pertenecer a esta familia?  Vamos a emprender un pequeño viaje genealógico hasta encontrar el momento en que la familia entronca con los Golfines. Para hacerlo más sencillo he preparado un pequeño esquema en el que se omiten todos los elementos que no nos interesan a la hora de establecer esta relación.


Martina Gómez casó con Alfón Gil Mogollón y sabemos que ya en 1402 era viuda. Alfón fue regidor de Cáceres y señor de la Casa de Mogollón. Solo tuvieron una hija, Leonor Alfonso de Mogollón, que casó con el Señor de Media Cacha, Gonzalo García de Ulloa. Tuvieron una hija, Alvar García de Ulloa y un hijo, Diego García de Ulloa, al que muchos ya conocerán por ser uno de los personajes más importantes de su tiempo en Cáceres, y al que apodaron "El Rico". También fue regidor de Cáceres y sabemos que falleció en 1485. Su casa se conserva junto al famoso Restaurante Atrio, en un precioso recodo en la Plaza de San Mateo y al que le debemos, por ejemplo, la fundación del monasterio de San Francisco el Real, protagonizando el famoso “milagro” de la moneda que ya os he contado en otra entrada. También fue comendador de Alcuéscar de la Orden de Santiago y fue quien le entregó las llaves de la ciudad a Isabel la Católica en su visita de 1477.
 
"El Rico" casó dos veces, con su segunda esposa (1445) Mencía Álvarez de Cáceres tuvo a Mencía Álvarez de Ulloa y Cáceres, que nació alrededor de 1448 y que casó con Pedro Alonso Golfín “El Viejo”, Señor de Torrearias y de Casa Corchada, entroncando así la familia de Doña Martina con los Golfines, en un heredero llamado García  Golfín, su tataranieto.
 
Así García Golfín unió a los Golfines de Arriba con el Señorío de Media Cacha, la Casa Fuerte de Martina Gómez y otros bienes de la familia, sobre todo los heredados de su abuelo “El Rico”. Existe documentación que confirma que la dehesa de Martina Gómez ya era de Diego García de Ulloa (su nieto) a finales del siglo XV y sabemos que la casa ya existía en 1520 porque en la confirmación del Mayorazgo de Rodrigo de Ovando, al hablar de una de sus propiedades se afirma que linda con "la dehesa que dicen las casas de Martina Gómez".


Originalmente la Casa Fuerte se parecería a la casa de la Carretona que está a poca distancia y estaría formada por un rectángulo en cuyos vértices se presentarían unos torreones cilíndricos defensivos de los que quedan uno en buenas condiciones y otro casi desaparecido ya. La casa que ahora vemos debió de levantarse, según Navareño, a finales del XV o principios del XVI y conserva de aquella época la puerta adintelada de granito con arco de medio punto, la ventana con arco conopial y el escudo que tanto llama la atención en la fachada.
 
Posteriormente se irían añadiendo otras habitaciones y espacios que servían de establos, fraguas... A comienzos del siglo XVII debió de hacerse una remodelación, como nos indica la inscripción que se intuye debajo del escudo, donde puede leerse:
co Reamese a
no 1618

Seguramente en esa fecha se añadió el simple esgrafiado que enmarca el escudo y en el que sobresalen las puntas de una cruz de Calatrava, así como algún otro elemento que desconocemos.
 
Hoy solo nos hemos querido asomar a una de las casas que engrandecen nuestros campos y que guardan mucha más historia de la que en un primer momento podría parecer. Es curioso cómo aún sigue en activo más de 500 años después de haberse levantado, y algo más extraño aún, sigue conservando el nombre de una mujer, Martina Gómez, que vivió entre los siglos XIV y XV, y por eso os he querido mostrar esta casa, Al Detalle.




BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA:
Arquitectura Residencial en las dehesas de la tierra de Cáceres. Antonio Navareño Mateos

Comentarios

  1. Me pregunto porqué habrán pintado una corona con cal, en la quinta foto se aprecia muy bien, bajo el escudo a la izquierda, sobre el ventanuco.

    ResponderEliminar
  2. Formaba parte de un escudo, se me olvidó ponerlo... completaré la entrada.

    ResponderEliminar
  3. Maravilloso post. Felicidades!

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...

Entradas populares de este blog

EL CALLEJÓN DE LOS HUESOS

Cuando uno viaja se encuentra lugares y rincones misteriosos, con leyendas truculentas, fantasmas del pasado, apariciones nocturnas o viejos cementerios que desatan historias muy atractivas para el turismo. Pues aquí en nuestro Cáceres, aunque casi nadie lo conoce, tenemos un callejón cuyos muros están plagados de huesos posiblemente humanos y que pasan inadvertidos a los visitantes. Es cierto que existen por el mundo capillas construidas con huesos, como ocurre con la " Capela dos Ossos " de Évora, no muy lejos de aquí. Hay otras en Austria, en Italia, la República Checa, o en el mismo Cáceres, donde hay una sacristía cuyo suelo está formado por huesos de cordero que ya os enseñaré otro día. Pero en este caso no hablamos de una construcción con huesos, sino que entre los materiales usados para la construcción de un muro aparecen numerosos fragmentos de huesos.  Desde la cuesta de la Compañía, que une la plaza de San Jorge con la de San Mateo, parte un pequeño calle

UN AMULETO ISLÁMICO POR LAS CALLES DE CÁCERES: LA MANO DE FÁTIMA

A todos nos es familiar la imagen de un llamador con forma de mano en casas más o menos antiguas, e incluso en las modernas, pero quizá no seamos consciente del origen y evolución de este símbolo y todo el significado que encierra. Hoy os quiero enseñar, Al Detalle, este curioso elemento que salpica toda nuestra ciudad y que encierra un gran significado profundo y simbólico. Esas aldabas con forma de mano son una evolución de otro símbolo que aún pervive, y que por estas cosas de la globalización, es cada vez más común: La Mano de Fátima. Este icono es la representación de una mano abierta con los dedos juntos y colocada de forma plana. Y aunque a nosotros nos llega como herencia islámica, la imagen y simbolismo de la mano puede encontrarse en el propio origen de la humanidad, no olvidemos las pinturas de manos con dedos “amputados” que en nuestra cueva de Maltravieso representan las pinturas rupestres más antiguas del mundo con una edad de, al menos, 66700 años. Pero también

LA CASA DE CAMPO, Y VIDA, DEL CAMARERO MÁS FAMOSO DE CÁCERES.

Hoy os quiero mostrar, Al Detalle, una de esas construcciones de actual uso agropecuario, pero que encierra entre sus agrietados muros la historia de un pasado floreciente, casi olvidado, y episodios destacados de la historia de nuestra ciudad, que se sepultan entre rebaños, uralita y abandono. Si atendemos al Registro Catastral, nos marchamos a la finca Torre Camarero, polígono 18, parcela 3, del término municipal de Cáceres. También se la conoce como "casa a la torre" o simplemente como la casa del camarero. ¿Pero quién era este camarero? Cuando visitamos la casa, con actual uso agropecuario como decía, y si los perros permiten que nos acerquemos un poco a la fachada, lo que más llama la atención es un precioso escudo enmarcado de alfiz con las armas de la familia de los Golfines, lo que nos da la primera pista de la identidad de ese famoso camarero. No obstante, el reto no es demasiado complicado a poco que se conozca ligeramente la historia de la ciudad de Cáceres. Nos