CÁCERES AL DETALLE

He de confesar que, por una razón que no logro descubrir, nunca había ido a visitar el conjunto de grabados que se encuentran muy cerca del Barrueco de Arriba, en Malpartida de Cáceres y que es, en realidad, uno de los más interesantes de los que se pueden disfrutar en la zona. Se halla en la zona más al norte del conjunto y a unos pocos centenares de metros del famoso escenario de la "Batalla del Dragón" de Juego de Tronos. Hace unos años se valló la zona, y junto a una de las pocas puertas de acceso, en una lancha a ras del suelo por el oeste y a medio metro por el este, encontramos estos grabados. Sobre esta gran lancha descansa una enorme roca partida por la mitad. Supongo que con estas indicaciones no tendréis problemas para encontrarla, no obstante aquí podéis consultar su ubicación . Estos grabados están perfectamente descritos en la obra de la que ya os he hablado en otras ocasiones: Pinturas y grabados rupestres esquemáticos del Monumento Natural de Los Barruecos. Ma

Aunque muchas veces había pasado por allí, hasta que el amigo Fernando Salgado, a través de Twitter, no me mandó una foto de este muro, no me percaté de lo curioso de la pintada. En el camino de las Arenas que comunica Malpartida de Cáceres y Casar de Cáceres, al lado de la zona en la que hay que atravesar el Arroyo del Tallón (sin puente ni nada), en el muro lateral de un paso canadiense, podemos encontrar este curioso grafito. Para intentar que no ocurra lo que me pasó siempre a mí, que pasaba de largo pensando más en cruzar el curso de aguas (que no siempre huelen muy bien) que en fijarme en la pintada, en el lateral del muro, bien visible, hay un LEEME. En el propio frontal de grises bloques tenemos una bicicleta pintada con trazos blancos y una frase en lo que parece italiano que no logro descifrar por completo. Parece que se entiende en una primera parte: "Questa macchina é il mod. Guzzi" que sería algo así como que "este carro/máquina es del modelo Guzzi". El

Antes de que nadie empiece a buscar el origen del nombre “peña Ricardo” suponiendo que se trate de un topónimo tradicional, he de decir que esa es la manera en la que yo la identifico de manera personal. A esta peña acudía con cierta frecuencia en mi adolescencia/juventud con quien me la descubrió, mi buen amigo Ricardo, y a él siempre la he asociado y uso su nombre para distinguirla en mis anotaciones personales de otras peñas de la zona. Este bolo para nosotros era un “secreto desvelado”, un “rincón oculto” al que volvíamos y que mostrábamos al resto de los amigos como quien desvela un oculto tesoro que merecía ser presentado con los honores de una maravilla de la naturaleza. Por eso os pido que me permitáis “el bautismo” de este lugar en pos de la engañosa nostalgia de juventud. Una vez hecha la necesaria aclaración, vamos a visitar esta roca semiesférica, parcialmente hueca y que se sitúa ligeramente apartada del núcleo más conocido encabezado por las Peñas del Tesoro, en dirección