CÁCERES AL DETALLE

Aunque muchas veces había pasado por allí, hasta que el amigo Fernando Salgado, a través de Twitter, no me mandó una foto de este muro, no me percaté de lo curioso de la pintada. En el camino de las Arenas que comunica Malpartida de Cáceres y Casar de Cáceres, al lado de la zona en la que hay que atravesar el Arroyo del Tallón (sin puente ni nada), en el muro lateral de un paso canadiense, podemos encontrar este curioso grafito. Para intentar que no ocurra lo que me pasó siempre a mí, que pasaba de largo pensando más en cruzar el curso de aguas (que no siempre huelen muy bien) que en fijarme en la pintada, en el lateral del muro, bien visible, hay un LEEME. En el propio frontal de grises bloques tenemos una bicicleta pintada con trazos blancos y una frase en lo que parece italiano que no logro descifrar por completo. Parece que se entiende en una primera parte: "Questa macchina é il mod. Guzzi" que sería algo así como que "este carro/máquina es del modelo Guzzi". El

Hoy vamos a visitar un paraje muy cercano a la ciudad de Cáceres, pero a la vez bastante poco conocido: la necrópolis de la Marrada de la Sociedad. En buena parte de la bibliografía se la conoce como de La Marrada del Muro, pero en realidad esa es la finca del otro lado del Arroyo Abadles y que circunda el paraje que hoy visitaremos. Voy a explicar la manera en la que yo accedí sin mayor problema, aunque hay varias formas de llegar al mismo sitio. Partimos del Hotel de los Arenales y tomamos el viejo camino a Arroyo de la Luz, desviándonos en su confluencia con el camino del Casar tomándolo hacia el norte hasta toparnos con el arroyo que en esta época del año nos permite el paso fácilmente. Justo ahí, en el paso sobre el río, donde vemos los restos de un pequeño puente ya desaparecido, pararemos porque nos encontramos en el lugar indicado. A unos metros vemos dos hermosas zahúrdas en bastante mal estado de conservación. También encontramos una pequeña edificación agropecuaria que p

En la búsqueda incansable de los supervivientes de la arquitectura vernácula de los alrededores de Cáceres, observo mapas actuales, ortofotos y cartografía antigua... con la pretensión de encontrar bujíos, pozos o zahúrdas. Pero en ocasiones esa búsqueda es tan exhaustiva, que los elementos cercanos, aquellos por los que paso con frecuencia, pasan inadvertido. Cientos de veces he recorrido el camino público que lleva de Sierra de Fuentes a Torreorgaz. Trascurre con una ligera pendiente descendente que hace el paseo agradable. Y según vamos a Torreorgaz, a la derecha, no muy lejos de la carretera, siempre observo un viejo pozo junto a un arroyo, que por cercano y accesible, no había parado hasta ahora a fotografiar, unas veces por prisas, otras por pereza, otras por no molestar a las vacas que pastan junto a él. Hace unos días, sabedor de lo injusto que estaba siendo con este precioso pozo, decidí acercarme a mostrarle mis respetos y disfrutar de su solemne sencille