A todos nos
es familiar la imagen de un llamador con forma de mano en casas más
o menos antiguas, e incluso en las modernas, pero quizá no seamos
consciente del origen y evolución de este símbolo y todo el
significado que encierra. Hoy os quiero enseñar, Al Detalle, este
curioso elemento que salpica toda nuestra ciudad y que encierra un
gran significado profundo y simbólico.
Esas aldabas
con forma de mano son una evolución de otro símbolo que aún
pervive, y que por estas cosas de la globalización, es cada vez más
común: La Mano de Fátima. Este icono es la representación de una
mano abierta con los dedos juntos y colocada de forma plana. Y aunque
a nosotros nos llega como herencia islámica, la imagen y simbolismo
de la mano puede encontrarse en el propio origen de la humanidad, no
olvidemos las pinturas de manos con dedos “amputados” que en
nuestra cueva de Maltravieso representan las pinturas rupestres más
antiguas del mundo con una edad de, al menos, 66700 años. Pero
también egipcios y fenicios, por ejemplo. representaban la imagen
de la mano con los mismos “poderes” protectores y apotropaicos
que la Mano de Fátima.
Nos
centraremos en la khamsa, que es el nombre que también recibe este
símbolo. La vinculación con la religión islámica es de tipo
legendario, sin haber una constatación del inicio o causas de sus
uso. De entre todas las historias que se cuentan yo os voy a destacar
tres:
Como sabemos
en la religión islámica Dios no es representado e incluso las
imágenes del propio Mahoma no son demasiado abundantes. Por eso dice
la tradición que preguntado el profeta por sus seguidores por los
símbolos que podían usar, él se entintó la mano, la plasmó en un
papel y la mostró convirtiéndose desde ese momento en una imagen
protectora y propiciatoria.
Pero su
propio nombre la vincula a una de las hijas de Mahoma, Fátima, y
también sobre eso hay leyendas. En una con carácter más épico se
cuenta que durante la batalla de EL BEDR HANIN los partidarios de su
padre no tenían una bandera que les identificara. Fue entonces
cuando Fátima mojó su mano en la sangre de un herido y la plasmó
en un velo que fue usado como estandarte en una lucha que consagró
la figura de Mahoma, y se consideró este símbolo como el protector
que llevó a las tropas a la victoria.
Hay otra
versión que refleja unos valores algo distintos. Las leyendas
cuentan que Fátima se encontraba cocinando para su marido cuando
éste se presentó en casa con una concubina. Tal fue la rabia y
sufrimiento de la hija del profeta que metió la mano en una pasta
ardiendo que guisaba y que el dolor moral era tan grande que ocultó
el dolor físico de las quemaduras. Desde entonces la Mano de Fátima
se convirtió en símbolo de paciencia y lealtad.
Sea cual sea
su origen, su uso se expandió a la misma velocidad y dimensión que
el propio Islam, llegando a ser un importante amuleto protector que
se colocaba en las casas, collares, pulseras... Su eficacia “servía”
contra el mal de ojo, las enfermedades... En nuestras tierras se hizo
muy popular entre los cristianos gracias a la influencia de los
moriscos, y tan considerable fue su expansión en el siglo XV y
comienzos del XVI, que formaba parte en los reinos hispanos de la
decoración incluso de iglesias, apareciendo en ciertos lugares junto
al monograma JHS, flores de Lis o pilas bautismales. Hasta tal punto
llegó su implantación que el propio Carlos V en 1526 convoca una
comisión episcopal para tratar sobre las costumbres de los moriscos,
y entre otras cosas prohíbe el uso de la Mano de Fátima.
Es muy
difícil luchar contra las supersticiones y creencias del pueblo a
base de “decretos”, por lo que el ingenio fue transformando este
símbolo hasta convertirlo en algo que era lo mismo, pero no igual:
las aldabas de mano que han llegado hasta nuestros días. ¿Qué
características tenía el símbolo prohibido? Ser CINCO dedos
EXTENDIDOS. Pues nuestros antepasados hicieron algo muy curioso,
esconder uno de los dedos, siempre el pulgar, y curvarlos. Además
convirtieron esta mano en un llamador de puerta con lo que
conseguían mantenerla en las entradas de las casas conservando su
función protectora del hogar. De esta manera tan ingeniosa nacen
estos llamadores que llevan dando la bienvenida a las casas cinco
siglos ya.
Todos estas
aldabas se componen de:
LLAMADOR: la
mano, como decía, con los dedos curvados y el pulgar oculto que
sirve para golpear otra pieza metálica junto con una bola que tiene pegada y así cumplir su función.
Cabe destacar la presencia de un anillo en algunas de estas
representaciones. Se cree que en origen lo que reflejaba era un ÓCULO
como símbolo de la protección frente al mal de ojo, pero que poco a
poco con el tiempo, esta iconografía dejó de entenderse y ese
“círculo” se fue transmutando en un anillo con más o menos
florituras y detalles. Puede presentarse tanto en el dedo anular como
en el corazón, y desconocemos si esto implica, o no, algún tipo de
mensaje, como ocurre con la mano representada, a veces la derecha y a veces la izquierda. Además, la zona superior se suele adornar con un puño con
puntillas bastante vistosas en muchos casos.
TAS O
BATIDOR: pieza metálica sobre la que golpea el pulgar y la gran bola que tiene fusionada y se consigue
el sonido para llamar a la puerta. Sus decoraciones son variadas y van desde la forma de estrella, de cuadrado a ser una pequeña placa de metal suficiente para hacer su función, pero casi invisible bajo el llamador.
ESPIGÓN:
parte donde se une con una bisagra el llamador y supone su parte fija
sobre la que bascula.
PLACA: une
el espigón con la propia puerta, y al igual que éste, puede
presentar distintas decoraciones que, además de por la mano del o de
la artista que la hicieron, ha ido cambiando a lo largo de los
siglos.
Ahora solo
nos toca hacer un pequeño recorrido por las calles de nuestra ciudad
antigua y alrededor y disfrutar de algunas de estas aldabas.
Evidentemente no las puedo poner todas, porque entre otras cosas
muchas se me habrán pasado por alto. Por eso os invito a mandarme la
dirección, o incluso imágenes, de estas aldabas indicando en qué
calle y número se encuentran, y poco a poco, prometo ir añadiendo
para hacer un “catálogo” lo más extenso posible.
CUESTA DE
ALDANA 9
Puerta y
aldaba con cierta antigüedad, presenta el anillo en el dedo corazón
y el puño adornado con un lazo. En este caso es una mano derecha. La
placa es cuadrada con adornos de pequeñas esferas. El tas tiene
forma de estrella y sobre él una estructura cuadrangular que se une
a la típica esfera. El espigón también se encuentra bastante
decorado.
GALLEGOS
4. Modelo similar al de Aldana 9.
GALLEGOS
13
Esta mano
parece de las más antiguas de las encontradas, pero al haber sido
pintada junto con la puerta perdemos algunos datos que nos podrían
dar más detalles de su “edad”. En este caso es una mano
izquierda y no presenta anillo, o al menos no se aprecia. El resto de
los elementos sorprenden por su sencillez, sobre todo el puño que es
muy muy simple.
CALLE
FUENTE NUEVA 10
Puerta
moderna con una aldaba que parece ser bastante más antigua. Presenta
el anillo en el dedo índice y es una mano derecha. El puño es muy
rico en adornos y presenta lo que parece una pulsera de perlas. La
placa es cuadrada con decoraciones en sus bordes. El espigón es
bastante simple al igual que el tas.
CALLE
POSTIGO 14
Al igual que
el Gallegos 13, la aldaba se ha pintado junto con la puerta. Se trata
de una mano izquierda con anillo en el dedo anular. No exista la
placa y el espigón se fija directamente sobre la puerta. El tas se
compone de una bola y una pequeña base que no destaca y casi no se
aprecia detrás del llamador. El puño es muy simple y carece de
adornos destacables.
PUERTA DE
MÉRIDA 4
La aldaba
representa una mano izquierda con anillo en el dedo anular. El puño
tiene una mínima decoración y parece distinguirse, además, una
pulsera. El tas y espigón son muy simples y éste se une a la puerta
por una placa cuadrada con mínimos adornos en sus aristas.
ANDRADA
8. Modelo similar al de Aldana 9 y Gallegos 4
MARGALLO 35.
Es una mano
derecha que parece tener el anillo en el anular, aunque por los
repintados no queda demasiado claro. El resto de los adornos son
bastantes sencillos, exceptuando el puño que sí aparece con más
detalles.
MARGALLO 46.
Modelo similar a Margallo 35.
MARGALLO 56.
Uno de los
modelos más antiguos de los que hemos visto. Es una estilizada mano
izquierda sin anillo. El espigón presenta un círculo con lóbulos y
la placa es cuadrada con adornos en los bordes. El tas es muy
sencillo
MARGALLO 66.
Mano
izquierda y parece verse el anillo en el anular. El puño está
ricamente adornado. La placa y el espigón están fusionados en una
única pieza y el tas es enormemente sencillo. Como ya hemos visto en
otros casos, la aldaba ha sido pintada junto con la puerta, lo que
impide disfrutar de sus detalles.
VALDÉS 28.
Mano
izquierda con el anillo en el corazón. El puño está muy adornado
con lo que parece una pulsera de perlas. La placa y el espigón
forman una única pieza al igual que el tas.
LA AUDIENCIA
(TRIBUNAL SUPERIOR DE JUSTICIA)
No me había
dado cuenta de la existencia de las aldabas de la Mano de Fátima en
este edificio. Fue mi amigo y compañero bloguero Miguel Ángel,
responsable de las páginas “CONOCE CÁCERES”, el que me puso
sobre la pista de su existencia. Es el único ejemplo mostrado hasta
ahora de dos llamadores juntos, aunque son casi idénticos. Son manos
izquierdas con el anillo en el dedo anular, puño profusamente
decorado con pulsera con medalla. Las placas son rectangulares y
distintas, parece que la de la derecha ha sido sustituida
posteriormente. El tas es muy sencillo y queda totalmente oculto por
el gran volumen de los llamadores.
Evidentemente serán muchas más las Manos de Fátima que existan en nuestras calles, por eso os pido que me digáis dónde hay más y yo iré a fotografiarlas y las subiré para ampliar esta pequeña colección de este viejo símbolo que perdura en las entradas de nuestras casas y que hoy os he querido enseñar Al Detalle.
Me ha encantado!!Ojalá te digan en qué calles hay más para ampliar la sección!!
ResponderEliminarComo siempre, muy interesante ! Con la origén de estas manos. Comienzo la busqueda en mi barrio...Son muchas.
ResponderEliminarUn pequeño detalle : no hay mano en la calle Gallegos, 4 pero en la calle Horno, 4...en la cruz de estas dos calles (cerca de la traversia Pizarro).
Y además hay otra mano en la calle Postigo, 14.
Mañana, iré buscar otras.
Muchas gracias Paqui¡¡¡ revisaré los apuntes, es fácil que me equivocara. Espero tu búsqueda¡¡ De nuevo, mil gracias¡¡¡
EliminarComo siempre, muy interesante. Con la historia de estas manos.
ResponderEliminarEmpiezo la busqueda en mi barrio, hay muchas.
Un pequeño detalle : no hay mano en la calle Gallegos, 4. Supongo que esta la mano situada en la calle Horno, 4 en la cruz de las dos calles (al fin de la traversia Pizarro).
Y en la calle Postigo hay otra mano al numero 14.
Mañana, iré buscar otras...
Puedes escribir en mejor lengua mi comentario...
ResponderEliminarBuscada de la mañana : otra mano sobre la puerta calle Puerta de Merida, 12.
ResponderEliminarA ver....
Hola,
ResponderEliminarOtras manos :
Plaza de la Concepción, 3
Calle San Roque, 9A (bajo del libro de la primera misa en la ermita de San Marcos).
Buscaré otras...
Muchas gracias Paqui¡ aún no pude ir a verlas pero prometo fotografiarlas e incluirlas. Mil gracias¡
EliminarSi quieres...
ResponderEliminarNuevas aldabas :
En la calle MACARENA : sobre las puertas 6 (hermosa) y 7.
Hasta pronto.
Otros manos :
ResponderEliminarUno en la plaza de las Claras.
Y uno de cobre sobre la puerta de la meson San Juan en la plaza San Juan (no me parece "auténtico ??? no parece estar aquí desde mucho tiempo y falta uno...).
Hasta luego.
Buenas tardes. Soy de un pueblo de Castilla y tenemos una vivienda con aldabas de mano, pero nos llama la atención que tienen una marca muy pequeña en la mano en la que parece apreciarse una cruz. Buscando en internet podría ser algo parecido a la cruz patriarcal. Sabes de qué puede ser y el significado que puede tener? Si me dices cómo hacerlo puedo enviarte unas fotos. Gracias!
ResponderEliminarBuenas tardes¡ Gracias por comentar. Búsqueme en Facebook (Cáceres al detalle) y ahí me puede mandar las fotos, me encantaría verlas. Un saludo y gracias.
ResponderEliminarHola, yo me encontré una de esas manitas, enterrada en el patio en México, en el estado de Veracruz y se me hace muy curioso, como desde España logro llegar hasta acá!
ResponderEliminarMe encanta muchísimo el blog
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