En la ciudad antigua encontramos un par de ejemplo curiosos y muy llamativos del uso de las "fachadas telón". Su definición es la de "portada principal del exterior de una construcción que no
deja ver la estructura del edificio, incorporando un cuerpo superior decorativo
que no se corresponde, al interior, con la estructura del edificio". Es decir, colocamos una fachada que es mayor que el edificio que hay detrás para que parezca más bello, impresionante o atractivo. Hay dos casos muy interesantes en la parte antigua de Cáceres: El Palacio Episcopal y La Casa del Sol.
PALACIO EPISCOPAL
La construcción más antigua del edificio data del siglo XIII, siendo la
fachada telón renacentista, del siglo XVI mandada hacer en 1587 por el obispo D.
Pedro Gaarcía de Galarza, según reza en el friso de la misma. Destaca en ella un arco de medio punto con dos hileras de sillares
almohadillados enmarcados con dos columnas. Dentro del conjunto, dos medallones
con figuras de lo que parecen dos indios americanos, hombre y mujer, dan idea
de la participación de la región en la colonización de América.
LA CASA DEL SOL
Este caso es algo distinto, porque seguramente lo que vemos ahora sería una torre que sufriría la orden de los Reyes Católicos y fue desmocahada. La casa se construyó en el siglo XV y reconstruida en el siglo XVI con el aspecto que vemos actualmente en la que se hizo esta fachada telón. El elemento más significativo de la fachada es el escudo
familiar, un sol con rostro humano cuyos rayos superiores aparecen mordidos por
cabezas de dragón, todo ello coronado por un yelmo. Un alfiz enmarca la puerta
con arco de medio punto y dovelas, bajo el escudo. En la parte superior de la
torre, continuación de la fachada, destaca un matacán semicircular con
aspilleras en forma de cruz.
Comentarios
Publicar un comentario