El pasado 20 de enero tuve la suerte de estar en Trujillo presentando en los LI Coloquios Históricos de Extremadura un trabajo titulado "Cruces grabadas en piedra en la ciudad antigua de Cáceres y su entorno", en el que hago un pequeño catálogo con un total de 67 cruces grabadas encontradas en nuestra parte antigua. Dicho trabajo, que me ha llevado más de tres años, será publicado por los Coloquios en su web y a partir de ese momento también lo subiré al blog, mientras tanto, os dejo la grabación de la pequeña ponencia ofrecida ese día 20, en la que muestro algunas de estas cruces y hago una reflexión sobre las motivaciones que llevaron a grabarlas de manera popular (en la mayoría de los casos). Espero que os guste y os sirva para fijaros aún más en los Detalles que pueblan nuestros muros y que forman parte de la intrahistoria de nuestra querida ciudad.
Cuando uno viaja se encuentra lugares y rincones misteriosos, con leyendas truculentas, fantasmas del pasado, apariciones nocturnas o viejos cementerios que desatan historias muy atractivas para el turismo. Pues aquí en nuestro Cáceres, aunque casi nadie lo conoce, tenemos un callejón cuyos muros están plagados de huesos posiblemente humanos y que pasan inadvertidos a los visitantes. Es cierto que existen por el mundo capillas construidas con huesos, como ocurre con la " Capela dos Ossos " de Évora, no muy lejos de aquí. Hay otras en Austria, en Italia, la República Checa, o en el mismo Cáceres, donde hay una sacristía cuyo suelo está formado por huesos de cordero que ya os enseñaré otro día. Pero en este caso no hablamos de una construcción con huesos, sino que entre los materiales usados para la construcción de un muro aparecen numerosos fragmentos de huesos. Desde la cuesta de la Compañía, que une la plaza de San Jorge con la de San Mateo, parte un pequeño calle...
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