Para todo el que haya entrado a buscar en este artículo
conspiraciones y espectros varios, tengo que decepcionarles porque lo de
“misteriosa” hace referencia a lo desconocido del origen y función que tenía la
cruz de la que vamos a hablar hoy en este post.
Esta cruz grabada en piedra se sitúa a los pies de la
Iglesia Parroquial de San Martín de Tours de Aldea del Cano, hacia el lado del
Evangelio y orientada, como cabe esperar en un templo cristiano de la segunda
mitad del siglo XV, hacia el oeste.
Se trata de una cruz latina sobre un rectángulo colocado a
modo de cartela, donde aparece grabado algún signo que no logro descifrar. Como
no sabemos su origen ni su función, pasaré a enumerar una serie de posibles
explicaciones atendiendo a lo que se encuentra en templos de nuestro entorno.
Lo primero que sorprende es que nos llame la atención una
cruz en una iglesia, pero evidentemente, esta no forma parte de las que
conforman los ritos penitenciales que suelen aparecer en el interior y que
representan el Vía Crucis, y diferenciándose, además, en que no hablamos de una
cruz de piedra, sino de una cruz grabada en la piedra.
Ya en una entrada dedicada a estos estos signos en las
puertas de la Iglesia de San Juan de Cáceres, os contaba que algunas se hacían
para persignarse a la entrada y salida de misa, pero por la tipología y la
disposición, descartaremos esta función para la cruz que nos ocupa hoy.
A partir de 1742 se “puso de moda” colocar también Vía
Crucis en el exterior por mandato del Papa Benedicto XIV que alentaba
fervientemente a los sacerdotes esta práctica en sus parroquias. Si esta cruz
correspondiera a esta tipología deberían aparecer, al menos, otras tres
alrededor del templo, porque en ocasiones todas las estaciones se reducían a 4:
una en el ábside, otra a los pies y otras dos en los laterales. En principio en
la iglesia de Aldea del Cano solo encontramos ésta, lo que nos indica que no
forma parte de un Vía Crucis, o que las otras desaparecieron en alguna reforma.
En el Vecino Portugal es muy común que en el atrio de las
iglesias aparezcan cruces sobre una cartela que indique ADRO (ATRIO)
delimitando el espacio sagrado, en esa frontera entre lo divino y lo pagano y
que se usaba, esencialmente, para que en aquella zona no accedieran los
animales. El atrio en realidad se consideraba como la extensión de la propia
edificación y por eso a veces aparecen rejas, escaleras, muros o zanjas a su
alrededor. El atrio también era conocido como RECINTO, o CAMPO DE LA IGLESIA, y
en ocasiones contaba con derecho de asilo o era el espacio dedicado a los
peregrinos, donde se colocaban cruces para indicarles que era la zona donde
podían descansar fuera del templo y que les servían como señales de
demarcación. Muchas veces estas cruces eran monumentales y en iglesias más
modestas, una simple marca en la roca, con o sin la palabra atrio, en las zonas
frecuentadas por los caminantes jacobeos.
Las cruces sobre cartelas también muestran a veces una fecha
que nos indica el momento de construcción de un edificio o una ampliación del
mismo, pero en este caso soy incapaz de detectar más de dos posibles dígitos,
lo que resulta muy extraño si querían reflejar verdaderamente una fecha.
Si nos fijamos bien, además, hay dos letras a la izquierda de
la cruz, que en mi opinión podrían ser más modernas, pero de la que podríamos dar
mil interpretaciones. Ese PA podrían ser las siglas de algún cantero, de algún
vecino… podría ser Prohibido Animales, Parte de Atrás… o yo qué sé, no me
atrevería a dar una explicación. Y si nos ponemos un poco fantasiosos, podría corresponder a las siglas de Peregrinorum Asylum, es decir, Asilo de Peregrinos, porque no olvidemos que en Aldea del Cano hubo un hospital de peregrinos durante siglos del que ya hablaremos en otro momento, y era paso obligado en la ruta jacobea del sur.
También en las zonas traseras de algunas iglesias se
situaron los cementerios parroquiales hasta que se prohibieron en 1787 por
Carlos III y se enviaron, por razones de higiene, a las afueras de las
ciudades. Es verdad que en la zona usada de camposanto era común grabar cruces,
pero normalmente eran tumularias y/o acompañadas de calaveras o tibias, por lo
que este uso no es muy probable para nuestra misteriosa cruz.
En mi modesta opinión formaba parte de una señalización del
atrio de la iglesia con la función de delimitar el espacio sagrado para entrada
de los peregrinos por los pies del templo y la obligación de mantener fuera a
los animales de este espacio divino, aunque nos quede por resolver el misterio
de lo que aparece en el interior de la cartela.
Hoy solo os he querido enseñar este pequeño detalle, que,
unido a la presencia casi única en la zona de un limosnero enorme de granito en
el lado de la Epístola, y la sencilla belleza del interior de la propia
iglesia, se convierte en razón más que suficientes para pasarse un día por
Aldea del Cano, conocer el pueblo, descubrir su impresionante fiesta del Tuero
y así adentrarnos en la riqueza de los más cercano, y muchas veces, más
desconocido.
Hola,
ResponderEliminarNo tengo explicación para tal cruz...
Me permite, si puede servir te...
Tu articulo me hace pensar :
Me parece que hay una cruz del mismo estilo sobre el palacio Caramena.
Pero, no esta sobre una iglesia y la cartela no es cuadrada pero redonda....Y no veo letras alrededor.
Seguro, la conoces...
Atentamente.
Paqui
Hola Paqui, muchas gracias por comentar¡ Sí la conozco y publiqué un post sobre ella hace años, lo puede leer aquí:
ResponderEliminarhttp://caceresaldetalle.blogspot.com/2015/08/vestigios-de-los-duelos-espada-en.html
Un saludo y muchas gracias
Si, conocía tu otro post...
ResponderEliminarLo que me sorprende es que son dos formas de cruces muy parecidas pero con dos sentidos muy diferentes : atrio para los peregrinos o duelos.
Es porque me permití de reunir las dos.
En lugares diferentes, claro.
Porque no...
Gracias por tratar de explicar todos estos detalles.
Atentamente.